Hoy os traigo un poema inédito de "otro de los míos" -como cariñosamente me gusta llamarlos-: de Blas de Otero, en el que hace un análisis -si se me permite el término- sentido y preciso de la situación internacional en la que vivía inserta España, nuestra patria, en aquellos momentos, tras la II G.M y demás "historias".
Este poema, el segundo inédito de "Redoble de Conciencia" -significativo, ¿verdad?-, lleva también un título más que elocuente y sintomático.
No deben tirarse los remos viejos,
ni derrocar los dioses hasta que se tengan dispuestos los nuevos.
Más vale falucho de vela, que remo de galera.
Europa apenas puede con sus muertos.
América se adentra por el hielo a mil por hora.
A contra cielo, Rusia alza una estrella.
Oriente entra en escena dando tumbos.
No nos tornemos de mares a piélagos.
Sólo Dios es bueno para barquero.
Aprendamos de nuestros autores, de nuestra cultura, de los que verdaderamente son sabios y buenos -no ladrones y necios-. Mira las palabras, amigo lector, con las que termina este poema. Independientemente de sus creencias, se rinde a su Arte y así opina. Y es que no hay más cera que la que arde y que es la realidad última.
Espero que os haya gustado y os inspire porque, para eso -y en mi caso me atrevería hasta decir incluso que sólo para esto- está también la Poesía, reina de las palabras, una fuente más y grande de mi, propia e intransferible, sanación y alegría y que, por estas mis ventanas, tengo el placer y honor de compartirla.
Ojalá más de un gobernarte y "gobernanta", más que leerla, sintieran y vivieran, por unos instantes, lo que en realidad es la "poesía". Ten por seguro que, entonces, caerían rendidos y se convertirían ante lo sublime de lo bueno y luminoso que también es la Poesía. Incorruptible bastión de la Cultura y de nuestra humana Vida.
Poesía que jamás podrá escribir, por cierto, con este tipo de sentimientos, que mueven y traspasan las palabras a través de los espacios y líneas, ninguna máquina y que debería enseñarse en todos los colegios con más ahínco si cabe, en vez de cosas tales como la "identidad de género", que a ver qué les puede importar y mucho menos para bien y real utilidad aportar esto -además de ser innecesario- a unos jóvenes infantes. Y si no, que se lo pregunten al mismísimo Blas de Otero, a ver qué dice, acerca de estas y otras cuestiones.
¡Que se levanten todos los intelectuales y exponentes del Arte comprometidos con la Salud, la Vida, los Derechos y las Libertades!
..."Si me muero, que no me muera antes
de abriros el balcón de par en par.
Un niño, acaso un niño, está mirándome
el pecho de cristal".
Blas de Otero.
No lo hubiera escrito ni deseado mejor.
Gracias.
Anna.
19.7.20